Zoraida Ceballos: Seis deliciosos postres navideños en el mundo



La Navidad está llena de platos deliciosos y abundantes, recetas especiales y dulces particulares, que varían o no, según las costumbres y tradiciones de cada país. Es por eso que en esta oportunidad se presentan una selección de seis postres navideños, de tantos que cautivan la gastronomía internacional.

El Christmas pudding: este pudín de Navidad no falta en las mesas en el Reino Unido. Su origen se remonta a la época medieval y surgió de la unión de 13 ingredientes. Estos representaban a Cristo y sus 12 apóstoles, y se popularizó cuando, en 1714, el rey Jorge I pidió que se sirviera en su primera Navidad. Entre otras cosas, lleva pasas, arándanos, ciruelas y manzanas, que son maceradas con brandy o ron. Además, lleva varios frutos secos, como avellanas, nueces y almendras.
  • Turrón: esta delicia, que es preparada tras la cocción de miel y a cuya pasta se le agregan almendras y clara de huevo, es un postre de tradición milenaria que no falta en las mesas españolas e italianas, a pesar de que se consume en todo el mundo. Existen muchas variedades de este dulce clásico decembrino. El de textura dura y el blando son los más comunes.
  • Pavlova: este pastel redondo de merengue crujiente va recubierto de un merengue esponjoso y muchos frutos secos. Es muy común en la cena de Navidad, tanto en Australia como en Nueva Zelanda.
  • Dulce de lechosa: este es el postre navideño por excelencia de los venezolanos. Para su preparación se utiliza la pulpa de la fruta verde, cortada en láminas. Se rocía con un poco de bicarbonato y se deja reposar. Luego, la lechosa se echa en una olla grande, con panela o azúcar, clavos de olor y agua. Se deja cocinar lentamente hasta que se cristaliza y se ablanda, por lo general, se come frío.
  • Bûche de Noël: este tronco navideño es un postre tradicional en varios países europeos, pero es famoso en Francia. Allí se originó, al parecer, tras la costumbre de quemar un tronco de madera para celebrar la llegada del solsticio de invierno. Básicamente, es un bizcocho parecido al brazo gitano que va cubierto de fondant de chocolate aunque hay distintos rellenos.

Finalmente está el Panettone: también llamado panettone, es un bollo dulce que no falta en la Navidad italiana. Fue inventado en Milán y consta de una masa brioche de unos 15 centímetros de altura, con pasas y frutas escarchadas, aunque existen muchas variantes. Traspasó las fronteras del país de la bota y es consumido en todo el mundo, especialmente en España y Latinoamérica.






Entradas más populares de este blog

Zoraida Ceballos: Qué comer en Madeira

Zoraida Ceballos: La interesante gastronomía mexicana

Zoraida Ceballos: Los dulces típicos que le dan sabor a la Pascua española