Zoraida Ceballos: IPA inglesa e IPA americana, pequeñas diferencias gran sabor
La cerveza de tipo India Pale Ale (IPA) está ganando cada vez más terreno y esta variación de las frías se hace un espacio entre los paladares de sus amantes. Dos de sus productores más reconocidos son Estados Unidos e Inglaterra y, aunque en teoría parece la misma bebida, existen marcadas diferencias.
Para
elaborar esta cerveza se utiliza un proceso de alta fermentación, lo que significa
que las levaduras que transforman los azúcares de la malta en alcohol flotan en
la superficie, y en su fabricación, se aplican levaduras que actúan a altas temperaturas y maltas
claras.
Así, su color va de dorado
pálido a oscuro, es muy aromática, de buen cuerpo y con sabor a
lúpulo de medio a alto.
Tanto en
Inglaterra como en Estados Unidos se elaboran cervezas de tipo IPA, pero
existen pequeñas distinciones entre cada origen.
De parte de
los europeos, sus IPAS son
de un color ámbar profundo y muy equilibradas en sus propiedades
organolépticas. Se consideran “muy maltosas”, con notas frecuentes a galleta,
caramelo y frutas. Además, entre sus particularidades destaca que el amargor que aporta el lúpulo
es moderado.
En cambio,
la producción americana se caracteriza por tener mayor fuerza del lúpulo. Su color es más
rojizo e incluso pueden ser un poco turbias. Sus aromas y gustos se categorizan
de “exclusivos”, por hacerse con materia prima estadounidense. Pueden ser más
ácidas, amargas y con notas cítricas y herbales más marcadas.
En
conclusión, el lúpulo es el factor
fundamental que permite distinguir la IPA inglesa de
la estadounidense.
Si bien su
nombre hace mención a la India,
no fue allí donde se creó, pero sí fue un lugar clave para darle
origen. La historia data del siglo
XVIII, en época de la colonia inglesa asentada en la India.
En ese entonces, la cerveza que se les enviaba a los británicos,
por las condiciones climáticas, llegaban en mal estado. Para solucionar esto,
los cerveceros ingeniaron un producto con mayor cantidad de lúpulo y alcohol.
El estilo
gustó y rápidamente se volvió muy
popular en Inglaterra y las naciones vecinas. Fue tal su
fama que llegó a Estados Unidos a mediados del siglo XX, ganando terreno
entre los bebedores. Allá cuenta con mayor aprecio como producto artesanal.