Zoraida Ceballos: Joan Roca reivindica el papel de la cocina para viajar
Al escribir el prologo del
libro de Jordi, Anarkia , su hermano mayor, JoanRoca, lo tituló “Trencar”; es decir, “romper”,
porque él, el pequeño, siempre fue un rompedor, señalando que “¡Ha desarrollado
técnicas y ha sido un gran rompedor”.
En este sentido, el pilar
de El Celler de Can Roca y gran referencia en el mundo
gastronómico, contaba sobre el escenario de San Sebastián Gastronomika
2019, la historia de cómo Jordi, de niños, le había roto una maqueta del
barco de Juan Sebastián Elcano al hundirla en una piscina.
El personaje histórico
vasco que le dio la vuelta al mundo en busca de especias, en la ruta
Magallanes-Elcano, se había convertido en un ídolo para Joan cuando apenas era
un niño, y su hermano le había roto una maqueta de ilusiones.
Esta historia real “y
cierta”, como dice Joan, tiene que ver con el amplio proyecto que los Roca
esgrimen desde hace 21 años, el viaje de los hermanos hacia el mundo para
descubrir la gastronomía e inspirarse.
“Somos viajeros, nos gusta
viajar, nos gusta tener en nuestros proyectos gente de culturas distintas que
hace que tengamos una apertura especial”, explicó el renombrado cocinero Roca,
en su ponencia Pasión creativa de alta proximidad.
Asimismo, el chef Michelin presentó su propia maqueta,
diferente a la que Jordi rompiera en una ocasión. Esta vez, se trató de un
mapamundi que funciona como una especie de mini-máquina, que sirve para
esconder alguna tapa o pinto especial.
“Esta es una pequeña obra
de ingeniería, una pequeña maqueta analógica y mecánica que cuando todas
las piezas están encajadas, y todos los lugares están en su posición correcta,
finalmente se abre y aparece una tapa especial”, comentó.
Finalmente, de esta manera
Roca reflexionó sobre la idea de que todas las personas vienen de todos los
lugares, afirmando que “queremos contarles de donde venimos y compartirlo con
todos vosotros”.
Por lo que, puso manos a la
obra y presentó distintos platillos internacionales, con el toque creativo de
los Roca. Uno de México, otro de Perú, uno de Turquía y uno
de Japón.
Este último lo ha llamado “tacoyaki”, una especie de taco que se
cubre con una galleta finita y crujiente de pulpo, para darle un sabor
oriental, diciendo que “estos platos te permiten hacer un viaje a otro lado,
experimentar cosas nuevas, llevarte a otros lugares”.